miércoles, 10 de agosto de 2022

Hace unos días estuve recordando algunos de los juegos o entretenimientos, que jugaba y/o compartía en mi etapa escolar… el teje, hacer trencitas a lápiz... pues bien, hoy vamos a recordar otro de estos juegos... EL BRILÉ, que jugaba por equipos durante el recreo, en las horas de gimnasia, en la parada de la guagua, en las excursiones…


Creo que la mayoría, por no decir todas, de las niñas de mi época conoce este juego; pero recordemos datos, algunos de ellos muy curiosos, como los relativos a su origen…



Se comenta que el término "BRILÉ", se atribuye al lexema francés "brulé", y nos hace deducir que estamos ante un posible préstamo de la lengua gala o galicismo.

Decir que el vocablo "BRILÉ" no aparece en diccionarios de referencia, aunque sí lo hace la unidad léxica "brilar" en el Diccionario Básico de Canarismosregistrada para las islas de Tenerife y La Palma, acompañada de la siguiente definición: “en el juego del brilé, eliminar a uno de los miembros del equipo contrario tras alcanzarlo con la pelota”.


Pues qué bien, siempre aprendiendo cosas nuevas.

Sigamos con el aporte de datos: Además del término Brilé, y sobre todo fuera de Canarias, se emplean otras voces como, por ejemplo, Balón prisionero, quemado, balón quemado, balón tiro, balón-muerte, a matar, el mate, mato cementerio.


También, en la práctica del juego, se distinguen voces que forman parte de un mismo campo semántico como muerte, matar, mate, mato y cementerio. En el caso de la designación quemado puede suceder que haya sido tomada de la traducción del término "brulé", palabra francesa de la que posiblemente deriva, tal y como se puntualizó anteriormente.


Al vocablo "prisionero" pudo otorgársele el valor que le confiere a una persona que cae en manos del enemigo, que en el desarrollo del juego se le atribuiría al participante que es "brilado" y que pasa a ocupar la zona delimitada para ello (el "cementerio").

¡Cuánta sabiduría vamos adquiriendo!..


En la revista digital canaria "BienMeSabe.org" podemos leer: "Este juego es uno de los juegos tradicionales infantiles más populares, que se jugaba y aún se juega en los patios de los colegios o en muchas de nuestras plazas.


Jugamos o marcamos un terreno rectangular, y lo dividimos a la mitad. A los extremos señalamos otra zona más pequeña denominada "cementerio". Formamos dos equipos que se colocan entre la línea central y el cementerio. Un jugador de cada equipo se coloca en el "cementerio" contrario, hasta que elimine a uno de su equipo, momento en que regresa a su campo.


El juego consiste en lanzar la pelota contra el contrario, intentando golpearle, quedando eliminado si se consigue, también se puede pasar la pelota al compañero que está en el cementerio, haciendo mover al equipo contrario de lado a lado de su cancha.


Los eliminados pasan al cementerio y gana el equipo que elimine a todos los jugadores del equipo contrario."

Pero, a pesar de que era un juego muy conocido, no todas las niñas gustaba practicarlo, pues se temía la fuerza del lanzamiento y su impacto en la recepción o contacto.


En mi curso había verdaderas expertas jugadoras a las que la mayoría temíamos, verdadero terror si alguna de ellas cogía el balón y se dispusiera a lanzar... lo normal es que se terminara en el cementerio... 


Además, también se jugaba en la parada de la guagua, pintando el campo de juego con tiza en la calle, y en las excursiones, en especial cuando íbamos a Las Lagunetas, pues su explanada permitía la práctica del Brilé muy bien.


¡Qué recuerdos!... duros y a veces dolorosos, pero que nos dejan pasado el tiempo muy buen sabor de boca.


"Enid Blyton de viaje por Canarias"   1950. Ilustración de un libro de la escritora inglesa Enid Blyton , autora de la colección &...