Se me ha ocurrido mostraros esta imagen que nos remonta en el tiempo... Fijaos bien... en la montaña el entonces Hotel Quisisana, luego la casa de los Ledesma (esquina con c/Enrique Wolfson), luego gran solar en el que más adelante irán diferentes viviendas particulares y el Colegio de la Pureza de María de Santa Cruz de Tenerife.
Veamos un poco de historia: Enrique Wolfson, un inglés de origen ruso y pionero en Tenerife del cultivo del plátano, mandó a construir una gran residencia en la que vivir. Quería una edificación semejante a un castillo británico y el arquitecto Mariano Estanga la hizo realidad. En él vivió con su familia, hasta que la inesperada muerte de su esposa hizo que trasladara su residencia a la calle Castillo, convirtiendo su residencia en un hotel.
El Hotel Quisisana fue inaugurado el 5 de diciembre de 1904, con una cena a la que asistieron los personajes más importantes de Santa Cruz de Tenerife de principios de siglo XX.
El hotel contaba con un excelente restaurante, muy alabado en la calidad de su cocina, donde se celebraban grandes banquetes oficiales. El entonces jefe del Gobierno General Miguel Primo de Rivera acudió a uno de ellos, en su honor, durante su visita oficial a la isla en octubre de 1928.
Se convirtió en un gran hotel de alto standing donde se alojaban, sobre todo, ingleses y belgas que hacían escala en Santa Cruz de Tenerife antes de continua el viaje rumbo a sus colonias en el continente africano.
Debido a las dos Guerras Mundiales y a la Guerra Civil Española, el descenso del turismo en Canarias fue casi total, por lo que muchos hoteles, arruinados, cerraron sus puertas y, en especial, el Hotel Quisisana.
El recinto pasó a depender de la Junta Insular de Turismo, hasta que en 1941 la Orden Escolapia pudo adquirir el antiguo hotel y algunas propiedades cercanas, y lo convirtió en uno de los centros educativos más emblemáticos de la capital tinerfeña. Posteriormente pasó a ser sede de CEU San Pablo, para, de nuevo, pasar a los Padres Escolapios.